Renace y fallece cada vez que quieras

¡¡¡Hola a todos!!!

Tengo una simple pregunta; ¿Eres honesto contigo mismo?

...

Esta vez quiero hablarles de lo que muy pocas veces se habla, no me refiero a lo prohibido, sino a lo negado.

Quiero hablarles del miedo, de la tristeza, la desesperación, el olvido, la impotencia, la angustia y la ira.

De lo que nosotros como sociedad seguimos y seguimos tratando como incorrecto, nuestras emociones.

Uno siempre va tratando de llenar las expectativas de lo que creemos que es "perfecto".

Nos decimos;

"Sé más amable hoy con tus compañeros"

"Quitate la pereza y ve al gimnasio"

"Hazlo más rápido la próxima vez"

"Sé más feliz mañana"

"Mejora un poco todos los días"

"No mires atrás"

"Jamás te rindas"

Como si nuestro cuerpo se tratase de un dispositivo electrónico y lo único que podemos hacer es actualizarnos y ser mejor que antes.

Un mismo patrón

Aclaro que no pienso que este incorrecto mejorar, sería ilógico no tratar de ser mejor persona y buscar la felicidad a cada momento, pero aveces solemos ser tan duros con nosotros mismos como si el hecho no mejorar sea cosa de castigo.

Y en esos momentos donde la tristeza o cualquier otra emoción "negativa" nos embarga;

¿Por que nuestro primer pensamiento tiene que ser "No, esto no lo tengo que sentir, por que no me hará feliz"?

Creo que uno de los mayores miedos de la humanidad es aceptar sus debilidades y vivir con ellas.

¿Es amor cuando solo aceptamos lo bueno en nosotros?

Crecimos en una sociedad donde la debilidad es sinónimo de inferioridad.

Desde pequeños nuestros papas todos los días nos dicen que no debemos llorar por cosas insignificantes. Que tenemos que estar felices para obtener lo que queremos y si se nos ocurre hacer una rabieta lo único que obtenemos a cambio es más represión.

Pero pongámonos a pensar...

¿Merece más la aceptación el niño que deja de llorar y sonríe que el que sigue llorando y hasta se enoja por que es lo único que en ese momento surge de su corazón?

Suena ilógico, ¿No?, hasta algo cruel.

Por que no dar la aceptación a los dos niños por igual, por el simple hecho de aceptar sus emociones.

Lo interesante de esta situación es que se va repitiendo mediante crecemos, solo que esta vez el juez somo nosotros mismos.

Estos últimos días han sido difíciles para mí, llenos de realidad y emoción.

Lo primero que pensé cuando me volví a sentir así fue "No, no debo sentirme así, no es bueno para mí"

Pero...

Cuando llega la tristeza u otra emoción "mala" a nuestra vida y no la aceptamos con los brazos abiertos, la experiencia termina siendo inservible. Hay veces en las que incluso intentamos bloquear esa emoción, negándola, algo innatural, inhumano.

¿Por que no aceptar esas emociones y abrazarlas?

Cuando llegue la tristeza, estar triste, sin pensarlo, sin juzgar.

Llorar

¡Gritar!

Conocerte a través de ella

Ser valiente y aceptar que esa tristeza también es parte de ti, también eres tú.

Imagínense, perdemos a un ser querido y la primer emoción que llega a nosotros es la tristeza, la desesperación, el abandono. En vez de tratar de estar feliz, de negarlo, de distraernos con miles de actividades nos abrimos a la tristeza y estamos tristes.

Tenemos que darnos cuenta que estas emociones llegan a nosotros por que nos las merecemos y no lo digo como un mal destino, sino que si es que estamos pasando por una situación "difícil" claro que merecemos estar tristes, merecemos llorar y abrazar nuestra tristeza. Somos seres sintientes y el no permitimos sentir es un acto de violencia, de desamor.

Aprender a aprender lo que nuestras emociones nos tiene que enseñar de las experiencias vividas.

Un ejemplo;

En una relación de pareja, darnos cuenta de que estamos sintiendo celos, darnos el permiso de sentir celos y crecer a través de la experiencia.

Siempre he pensado que la alegría no es estar riendo y bailando todo el tiempo, sino que es una armonía y paz compuesta por la aceptación de todas nuestras emociones.

Un conjunto.

Así que estos días me aventure a entrar en mí tristeza, la gente a mi alrededor se daba cuenta y trataba de animarme pero sabía bien que el animo llegaría a mi vida por si solo.

Ahora que me siento más tranquilo me he dado cuenta que las cosas se solucionan por si solas.

Que las cosas pasan, cambian y siempre van a ser así y cuando la tristeza vuelva a mi vida la voy a aceptar con una sonrisa en mi rostro, por que sé que es el camino que me llevara a la paz.

¡Así que date el permiso de ser quien eres!

De sentir lo que ya estas sintiendo, sin miedo a ello.

De despertar, estar enojado y cancelarle a tus amigos.

De abrazar a todas las personas y acurrucarte en ellas por que el amor desborda hoy en ti.

De estar en tu último año de estudios y rendirte porque así te lo pide tu corazón.

De morirte de nervios antes de ver a alguien que todo el día has querido ver.

Date el permiso de vivir la experiencia que la vida te ha regalado sin miedo a sentir miedo.

¡Ahora que nosotros somos los jueces de nuestra vida, podemos premiarnos siempre!

Voy diciendo que somos perfectos y no me refiero a que por ser imperfectos somos perfectos, no, somos perfectos por ser nosotros mismos, así que cualquier cosa que hagamos, pensamos o sintamos esta correcta, por que viene de nosotros.

Es así y solo así como conseguiremos nuestra paz, darnos cuenta que el caos y la paz es la misma cosa vista desde diferentes ángulos.

P.D. Quiero darle las gracias infinitas a @enrique.mount por una sesión increíble y lograr que todo lo que tenía dentro de mi corazón se reflejara en las fotos. <3